¡Camino al altar! es una excelente herramienta para provocar conversaciones profundas y necesarias que generalmente no salen en lo cotidiano. Darle el espacio a la pregunta, conocer qué piensa el otro, hacia dónde se camina y ver una dirección común es resultado de estas tarjetas. Creemos que es una dinámica muy valiosa y enriquecedora. Lo recomiendo ampliamente, excelentes profesores y sin duda es una increíble oportunidad para prepararnos.”

Ambos percibimos como el juego, nos permitió crear un ambiente de apertura, entendimiento y comunicación. Sin duda, nos dimos la oportunidad de platicar temas importantes y darles la importancia que se merecían. Por lo que, el fin de semana se tornó en un espacio de darle seguimiento a esos temas y aprender a voltear al corazón del otro y saber escuchar. Quedamos con ganas de volver a repetir el juego para aprender que hay en el otro, crecer en conocernos y en cómo amarnos.

Las tarjetas ¡Camino al altar! Y Reconecta son geniales. Yo soy terapeuta de pareja y las utilizo en la consulta de diferentes maneras. A veces ayudar a terminar una sesión qué fue difícil de una manera ágil y que reduce el estrés de la sesión. También ayuda a las parejas a actualizarse y a veces a conocerse en áreas en las que no se conocían. Para los que aún no se casan les ayuda a conectar y a tener conversaciones más profundas. Las recomiendo mucho en cualquier etapa en la que estén. Nos hace más fuertes y mejores personas.”

Haber sabido de la existencia de las cartas me llenó de ilusión, porque parecía la pieza que estaba buscando para hondar en la preparación a nuestro matrimonio. Aunado a dirección espiritual, retiro sobre pláticas matrimoniales y varios factores más, las cartas fueron una herramienta importante que nos hicieron profundizar en temas que no teníamos ni idea que debíamos poner sobre la mesa antes de tomar la gran decisión de casarnos. Pudimos identificar nuestras diferencias y conocer aquellos sueños que, por extraño que parezca, en 7 años de noviazgo nunca habíamos verbalizado; así con ayuda de las preguntas contenidas en las cartas aprendimos a dejar las suposiciones sobre el otro atrás para mejor preguntar directamente y en ese camino conocer mejor a tu pareja. Actualmente, a 3 años de matrimonio seguimos haciéndonos preguntas para fortalecer nuestra amistad y relación.

Nos parece un juego muy apropiado para fomentar una mejor comunicación y consolidar la confianza y vida entre esposos. Sin duda cumple con su objetivo. Si bien hay cosas que suelen comentarse, de lo más valioso es dedicarse ese tiempo y profundizar en cuestiones del matrimonio y del otro, que normalmente la rutina no te permite profundizar.